Por: José Perilla
Andrés Segovia murió en Madrid el 2 de junio de 1987. Así llegó a término final una larga vida de noventa y cuatro años dedicada casi por entero a la música. Segovia fue el guitarrista clásico más importante del siglo XX y, por esa vía, un agente decisivo en el desarrollo musical a nivel mundial.
Por eso, hoy queremos recordar quién era, cómo era y qué hizo. Todo ello es posible a través de los archivos que conserva Señal Memoria. Otto de Greiff, trabajador de la Radio Nacional y de la HJCK desde los inicios de cada emisora, será nuestro guía. Y su voz estará acompañada por la de “El Maestro”, forma elocuente en la que se conoció a Segovia a nivel mundial.
Segovia el pionero, Segovia la leyenda
La voz de Otto de Greiff procede de un programa especial realizado en la HJCK el 3 de junio de 1987, un día después de fallecido Segovia. De Greiff, quien conoció personalmente al músico, nos habla de sus históricos aportes.
Otto de Greiff – Segovia, pionero y leyenda
Al respecto, dos fragmentos con la voz de Segovia. El primero sobre la labor de ser músico intérprete, la disciplina y la vocación. El segundo, una reflexión de Segovia sobre la mujer, pero que deja ver en realidad una faceta recatada asociada a un ideal de virtud espiritual. Bien se dijo siempre que Segovia fue un tardío representante del idealismo romántico.
Andrés Segovia, 1980 - Inspiración, vocación, transpiración - HJCK 1991
Andrés Segovia – Mujeres y espíritu
Segovia, orgullo y felicidad
Como sucede con tantas otras “estrellas” de la industria musical, en torno a Segovia creció un halo de antipatía. Ya fuera resultado de percepciones erróneas o por cuenta del propio carácter que tuvo el Maestro. En el primer extracto, De Greiff se inclina por lo primero. En los otros dos, Segovia nos habla de sí mismo.
Otto de Greiff – La antipatía de Segovia
Andrés Segovia, 1980 - El hombre feliz - HJCK 1991
Andrés Segovia, s.f. - Su longevidad - HJCK 1984-04
Segovia, su labor
En esta sección invertiremos el orden. Habla primero Segovia para contarnos cuáles fueron los propósitos de su vida. Uno muy importante fue renovar el repertorio de la guitarra. De ello nos habla De Greiff. Y en relación con ello, finalmente Segovia se refiere a su dinámica de estudio.
Andrés Segovia, 1980 - 4 propósitos - HJCK 1991
Otto de Greiff – El repertorio de Segovia
Andrés Segovia, 1985 - Estudio y práctica - HJCK 1993-03-07
Segovia, el concertista
Para terminar, Andrés Segovia como concertista. Desde su début en 1908, las más importantes (y muchas que mucho menos) ciudades del mundo tuvieron a Segovia en sus auditorios. Eso sí, en los mejores que hubiera. Conciertos de élite, pero promocionados “como cualquier otro”. Y el éxito. Cosas así quedaron en la memoria de Segovia. Aquí lee sus palabras sobre el primer concierto que tuvo en París. Año 1924. Fue el viaje en que conoció a Villa-Lobos y también se encontró con su amigo Joaquín Nin.
Andrés Segovia, 1975 - Debut en París - HJCK 1991
Ahora Otto de Greiff. De la memoria viene también la primera vez de Segovia en Bogotá. Fue en 1938. El sabio advierte sobre un aspecto decisivo en la historia de Segovia y su aporte en la de la guitarra clásica: el silencio cerrado durante los conciertos.
Otto de Greiff – Segovia en Bogotá, 1938
Otto de Greiff – Segovia en silencio
