Cuatro ideas para entender el pensamiento de Eduardo Galeano, con su propia voz
Por allá en el año 1989, cuando este país pasaba por las duras y la maduras, Eduardo Galeano fue invitado a la que fue la segunda edición de la Feria del Libro de Bogotá. Bastante agua ha corrido por debajo del puente desde entonces. Pero, hasta hoy, las ideas de este escritor uruguayo se mantienen vigentes. Es por eso que, ahora que se conmemora un año más de su nacimiento (3 de septiembre de 1940) queremos compartir algunos fragmentos de una entrevista que concedió Galeano en aquella ocasión.
De primeras, nos vamos con un fragmento de aquellos para sacar suspiros. Cosa en la que Galeano fue muy bueno, porque siempre hubo en sus palabras una luz de esperanza, así trataran sobre injusticias y quebrantos del destino latinoamericano. Aquí nos habla del sentido que tiene la palabra para aprender a mirar.
Eduardo Galeano - La palabra que ayuda a mirar - 1989
De segundas, seguimos con el asunto de la palabra humana. Ahora Galeano nos habla de “el coco” de la objetividad. ¿Es posible ser objetivo? Muy pocos hoy vacilarían en responder rotundamente que no. Pero las cosas en 1989 no eran aún tan claras. Por eso es reveladora esta perspectiva de Galeano, en la que recurre de nuevo a esas historias de su realidad.
Eduardo Galeano - La objetividad - 1989
Y hablando de realidades y palabras, hay un elemento crucial en la vida de Galeano y otros tantos escritores que dejaron huellas profundas en el siglo XX (García Márquez, para no ir más lejos): el periodismo. Eduardo Galeano ejerció esta labor desde la precoz edad de 14 años. Y esto marcó su contacto con la realidad y la escritura de todos sus libros.
Eduardo Galeano – El periodismo - 1989
Y en sus andanzas como periodista, a Galeano le ocurrió una cosa que a muy pocos. Estando en la China de la revolución comunista, le dio por solicitar una entrevista con “El último emperador”. ¡Y el personaje se la concedió! Claro, hubo que servirse de un traductor y ahí fue que se hizo inolvidable la divertida historia.
Eduardo Galeano – El último emperador – 1989
Así llegamos al final de este corto pero ilustrativo homenaje a uno de los grandes de las letras latinoamericanas, el uruguayo Eduardo Galeano: aquel capaz de leerse completos (como quizá ningún otro ser humano) la biblia y El Capital de Carlos Marx; aquel autor de Las venas abiertas de América Latina (libro que Chávez regaló a Obama y volviose a convertir en best seller después de como 30 años de haber sido publicado). Ahora, si quedaron con ganas de más más, pues aquí tienen.
