El amor y la muerte, de la mano en el radioteatro "Cumbres borrascosas" | Señal Memoria

Publicado el Lun, 25/08/2014 - 13:09 Artes y oficios
El amor y la muerte, de la mano en el radioteatro "Cumbres borrascosas"


El primero de septiembre de 1957, ciento diez años después de su publicación, la Radiotelevisora Nacional de Colombia presentó Cumbres borrascosas, novela romántica de la autora inglesa Emily Brontë (1818-1848). Esa noche, al poco de empezar el programa Teatro dominical, la audiencia penetró en un mundo inhóspito. Soplaba el viento; crujían las maderas; se abrían puertas pesadas, reticentes a las visitas; un perro de aspecto temible gruñía; ninguno de los moradores de Cumbres borrascosas, nombre de la casa situada en ese páramo, parecía feliz. El paisaje creado por la versión radial de la novela es producto de los efectos sonoros y la música, que, sobre todo al comienzo del radioteatro, aciertan a crear la hostilidad que conviene al sombrío y enigmático Heathcliff, protagonista de esta historia de amor junto a Catalina Linton.

La pasión que narra la novela de Emily Brontë es superior al bien y el mal, poco importa que Heathcliff no abrigue piedad hacia ningún ser humano, nada importa que Catalina sea voluble y caprichosa; es un amor que no depende de la voluntad de sus protagonistas, es incontrovertible, como un hecho o un imperativo. Ha echado raíces profundas y nada puede modificarlo, ni siquiera la muerte. Al contrario, tiende hacia ella para poder realizarse con absoluta libertad en ese paraíso lóbrego que son los pantanos por los que Catalina y Heathcliff vagaron en la infancia. Ese paisaje se ha arraigado en su memoria. No puede disociarse del vínculo indestructible que los une. Ambos morarán en la órbita de Cumbres borrascosas cuando dejen la vida.

Aunque los personajes de esta historia sufren enfermedades y desmayos y se debilitan si no comen, la causa última de sus síntomas no pertenece al mundo material. A veces, su mirada yerra en la indefinición o adquieren un aspecto sobrenatural. La cercanía a la muerte embellece y torna melancólica a Catalina. Ella y Heathcliff están conectados con algo que está más allá de este mundo. La vida de Heathcliff podría resumirse en el propósito de recuperar a Catalina después de que ella muere. Su loco proyecto, lo único que le importa en la vida, es volver a reunirse con Catalina. Desprecia casi a todo el mundo y tiene el carácter, el vigor físico y los medios económicos para hacerlo. Sin tregua, con una obstinación más que humana, dirige sus pensamientos y su mirada hacia lo fantasmal, donde habita Catalina.

Jorge Burgos escribió esta versión radial de Cumbres borrascosas. Ejerciendo la libertad del adaptador, se apartó un poco de la obra original. Por ejemplo, reemplazó a Elena Dean, ama de llaves de la Granja de los Tordos, propiedad de Heathcliff, por un personaje que el radioteatro presenta así: "Nelly, la vieja negra Nelly, la más devota servidora, sería la encargada de referirle la historia a Lockwood". Esa historia no es otra que la de los habitantes de Cumbres borrascosas, cuyo mal carácter padeció una noche el señor Lockwood, inquilino de Heathcliff en la Granja. Salvo por el color de su piel y el acento de su voz, Nelly cumple el mismo papel que Elena en la obra de Emily Brontë, el de narradora de la historia.

Miguel Ignacio Vanegas estuvo a cargo de los efectos de estudio de Cumbres borrascosas y Gonzalo Vera Quintana musicalizó y dirigió el radioteatro. La obra está identificada con los códigos CD009510 y CD009511 y se puede escuchar en el catálogo de la Fonoteca de Señal Memoria.

Carlos Fernández

Fecha de grabación: desconocida, posiblemente se grabó en 1957, poco antes de la emisión.
Fecha de emisión: 1 de septiembre de 1957.
Lugar de grabación: Radiotelevisora Nacional de Colombia.
Referencias: siglo XIX, Inglaterra, romanticismo



Retrato de Emily Brontë pintado por su hermano Branwell.

Fecha de publicación original Lun, 25/08/2014 - 13:09