Nació en Nicaragua y gran parte de su adolescencia la pasó en Venezuela. En 1935 llegó a Lima donde lentamente su carrera actoral fue en ascenso.
En 1953 estuvo en Colombia y de ahí sale la siguiente anécdota publicada en el Diario El Comercio de Perú: "A un lado del abdomen, Enrique Victoria esconde la huella apenas perceptible de un impacto de bala. No es una cicatriz tipo ‘galón de guerra’, fruto de sus luchas de años por los derechos de los actores, ni tampoco el resultado de alguna reyerta amorosa; es la marca de Sangre Negra, un bandolero que en los años 40 atacaba a los viajantes de caminos que se aventuraban a ir de noche por los senderos colombianos. Esa vez, la compañía de teatro con la que Victoria iba de gira fue la premiada. El actor tenía 28 años y cuenta que la sacó barata. “Tenían por costumbre degollar a sus víctimas y jalarles la lengua hasta dejársela así como una corbata”, dice y echa una carcajada mientras su auditorio –es decir, este equipo periodístico– escucha su relato con sincero estupor."
Trabajó en más de 30 producciones de televisión entre novelas y programas de humor. Pero sin lugar a dudas su aporte más significativo fue al teatro. Las cifras de su trabajo son impresionantes: 300 comedias, 35 zarzuelas, 25 operetas, 12 obras de teatro clásico y 120 dramas.
También desarrolló su carrera en el cine, su participación en la película La Muralla Verde de 1969 fue nominada al premio Oscar de 1970, como mejor película extranjera. Su última aparición en la pantalla grande fue en el 2014 en la película Viejos amigos.
Fue un gran abanderado de los derechos de los artistas desde la Asociación Nacional de Artistas, Intérpretes y Ejecutantes (ANAIE), donde impulsó la Ley del Artista.
En la fonoteca de Señal Memoria conservamos un audio con la voz de Victoria, cuando visitó Colombia para participar en el Seminario Internacional El Retablo de las Maravillas.