El Buen Gusto, la Eutropélica y la tertulia masónica que fundó Antonio Nariño, conocida como El Arcano Sublime de la Filantropía, fueron tres espacios en los que los criollos dieron paso a la circulación de muchas de las ideas que sentaron las bases para la Independencia.
A finales del siglo XVIII las ideas modernas e ilustradas provenientes de Europa, particularmente de Francia, ingresaron a la Nueva Granada por distintas vías: el comercio de libros, el acceso a algunos periódicos y sobre todo la definición de espacios de reunión que los criollos empezaron a crear para dar paso a la circulación de nuevas ideas.
Antonio Nariño, junto con el médico masón francés Lois Rieux fundó en 1793 El Arcano Sublime de la Filantropía, ésta fue reconocida como la primera logia masónica de la Nueva Granada, naturalmente como un espacio de discusión, apropiación e interpretación de las ideas francesas de Libertad, Igualdad y Fraternidad que propugnaba la Revolución Francesa.
Masonería y tertulia
Muchos de los próceres de la Independencia son asociados con la masonería. El carácter secreto que tuvo esta logia, sumado a las ideas revolucionarias que subyacían a la Independencia convirtieron a los masones en objeto de persecución. En Londres, el Generalísimo Francisco de Miranda fundó, junto con otros criollos, una de las más prominentes logias, la “Lautaro”. A ella pertenecieron personajes como Simón Bolívar, Francisco de Paula Santander, Bernardo O`Higgins, José de San Martín, entre otros.
Aunque El Arcano Sublime de la Filantropía fue la única de estas tertulias de carácter masón, las ideas de la Ilustración circularon también en las demás tertulias. El afán científico de Caldas, Mutis y Zea nutrió la Eutropélica, fundada por el cubano Manuel del Socorro Rodríguez, quien a su vez dio inicio al primer periódico de la Nueva Granada, el Papel Periódico de Santa fe de Bogotá. Por su parte la Tertulia del Buen Gusto era organizada por doña Manuela Sanz de Santamaría; allí y participaron Camilo Torres, José Fernández Madrid, Miguel de Pombo, Francisco Antonio Ulloa, Manuel Rodríguez Torices y José Manuel Restrepo entre otros.