El movimiento sionista, cuya primera reunión fue en 1897, dio comienzo a lo que sería un impulso fundador en el pueblo judío. El esfuerzo y las ganas de recuperar lo que para sus ancestros era la tierra prometida. Después de muchos años de persecución en Europa y con los hechos del holocausto aún presentes en su memoria y en sus cuerpos, los y las judías del mundo encontraron, en la Resolución 181 de la ONU, un motivo de esperanza, una respuesta y un cumplimiento a dicho sueño.
El 14 de mayo de 1948, hace 75 años, se declaró la independencia de Israel del mandato británico. Este evento fue como un sueño para los miles de judíos que sufrieron persecuciones en Europa: la Segunda Guerra Mundial llegó a su fin y ellos fueron los más afectados con cientos de miles de víctimas humanas. También fue la culminación de un sueño que se había planteado durante el primer Congreso Sionista de 1897: retornar y fundar el Estado de Israel en la tierra “prometida”. Esto solo fue posible gracias a la aprobación de la Resolución 181 de las Naciones Unidas. A continuación se puede apreciar un fragmento del episodio Israel del programa Aldea Global de 1998 en el que el rabino Alfredo Goldschmidt habla sobre el sueño sionista:
Prado Mejía, Manuel (Productor). (1998). Aldea global: Israel. Colombia: Inravisión-Señal Colombia. Archivo Señal Memoria, BTCX30-010768
Resolución 181 de Naciones Unidas
El 29 de noviembre de 1947, durante la Asamblea General de la ONU, se iniciaron las votaciones por la Resolución 181 que buscaba establecer la división del mandato británico de Palestina con el fin de crear en el territorio dos nuevos Estados, uno judío y otro árabe. De los 56 países miembros de la ONU que asistieron a la votación, 33 votaron a favor, 13 en contra y 10 se abstuvieron. La resolución establecía las pautas que los dos estados debían seguir una vez estuvieran consolidados.
En el documento oficial de la Resolución 181 aparecen puntos tales como el abandono progresivo del territorio por parte del gobierno mandatario (los británicos); la entrega del mismo a una comisión que se haría cargo de establecer las fronteras de los dos nuevos estados; la forma en que se establecería que un ciudadano haría parte de uno u otro estado; la formación de los dos nuevos gobiernos utilizando un proceso de elección democrático; las libertades con las que contarían los habitantes de los dos estados que estaban próximos a fundarse; los puntos clave que debían contener sus constituciones; lo que ocurriría con la ciudad de Jerusalén que pasaría a hacer parte de un régimen especial llamado Corpus Separatum, entre otros.
Jerusalén
La figura de Corpus Separatum se usó para definir el régimen especial que tendría Jerusalén una vez se dividiera el mandato británico de Palestina debido a su relevancia para el islam, el judaísmo y el cristianismo: las tres grandes religiones monoteístas. En la Resolución 181 se establecen algunos de los parámetros bajo los cuales la ciudad será gobernada y se definen los peajes y tarifas que deberán pagar las personas que quieran ingresar a ella. En este fragmento del programa la Hora Cultural hebrea se clarifican los motivos por los que Jerusalén es tan importante para cada una de las tres religiones:
Calderón, Ángel (Locutor). (2003). La hora cultural hebrea. [Historia de Jerusalén]. Colombia: HJCK. Archivo Señal Memoria, HJCK-DGW-077547-02
Posición de Colombia
Santiago Salazar Santos, en su espacio de Comentarios en la HJCK, documento custodiado por el Archivo Señal Memoria, lee el discurso emitido por López Pumarejo una vez se pronunció el veredicto de la Resolución 181. En él, López Pumarejo dejó claro que la delegación colombiana estaba a favor de la fundación del Estado judío, sin embargo, se abstuvo de votar. Esto debido a que los argumentos y los planteamientos dados tanto por los opositores como por los que se encontraban a favor no bastaban para proveer una resolución al conflicto que se estaba viviendo y que se experimentaría en la región. También, López hizo un llamado a las Naciones Unidas a que retrocedieran en su decisión con el fin de buscar mejores caminos que le permitieran a los pueblos judíos y árabes de la región convivir de forma pacífica en un futuro cercano. En el siguiente audio se puede escuchar la lectura de Salazar de algunos fragmentos del discurso de López Pumarejo:
Salazar Santos, Santiago (Locutor). (1996). Comentarios.Colombia: HJCK. Archivo Señal Memoria, HJCK-DGW-075312-01
Declaración de independencia de Israel
La fundación del Estado de Israel, comenzó con la lectura de su Declaración de independencia. Se llamó así, porque judíos de todo el mundo habían estado trasladándose en pequeñas cantidades desde algunos años atrás a la tierra que el sionismo había propuesto como el lugar en que era importante fundar su Estado.
La declaración de independencia del Estado de Israel tuvo lugar el viernes 14 de mayo de 1948, un día antes de que el gobierno británico partiera por completo del territorio. La decisión de hacerlo ese día fue para no interrumpir el sabbat, fiesta religiosa judía que tiene lugar todos los sábados.
En la Declaración de independencia se establece que el consejo del pueblo gobernará hasta que se elija el nuevo gobierno. Se invita a todos los judíos del mundo a volver a su tierra para construir y lograr la redención de Israel. Finalmente, en ella se invita a los países árabes que colindan con ellos a la cooperación y a la paz. En el siguiente fragmento de Aldea Global de 1998 se observa al que en su momento fue el embajador de Israel Gil J.M.C Aerzyeli hablando sobre la proveniencia de algunos judíos que se radican en Israel y mencionando algunas cifras de la época:
Prado Mejía, Manuel (Productor). (1998). Aldea global: Israel. Colombia: Inravisión-Señal Colombia. Archivo Señal Memoria, BTCX30-010768
Conclusión: un comienzo agridulce
A menos de 24 horas de formado el Estado de Israel, los ejércitos de Egipto, Jordania, Siria, Líbano e Irak invadieron el territorio iniciando la guerra de independencia que cobraría más de 6000 vidas a lo largo de los 15 meses que duró. Esta acabó en 1949 en un armisticio.
Las palabras del discurso de López Pumarejo, como hemos visto, resuenan hoy en día. En su momento fueron un llamado a replantear la decisión de la mayoría y a pedir una mejor elaboración de los puntos de la Resolución 181. Su discurso buscaba encontrar una solución que pudiera satisfacer a los pueblos árabes y judíos. Algo que no se ha logrado incluso hoy.
Por: Simón Wohlgemuth Neira
