Francisco de Miranda
Conocido como “el americano más universal”, Miranda pasó la mayor parte de su vida en Europa y Estados Unidos. Algunos afirman que desde allí diseñó el ideario político que luego seguirían Bolívar, O`Higgins y San Martín. Ese ideario se nutrió de su propia contribución a la guerra de Independencia de Estados Unidos como soldado voluntario del ejército español en la Batalla de Pensacola; recordemos que muchos criollos acomodados, como Miranda, fueron miembros del ejército español y que curiosamente España fue uno de los países que apoyó a los independentistas americanos en su lucha contra los invasores ingleses. Así mismo, Miranda vivió la Revolución francesa; su participación en la decisiva batalla de Valmy le permitió hacerse al título de mariscal del ejército francés; es por ello que su nombre está tallado en el arco del triunfo de París. A esta vida cargada de triunfo se suma la protección que le ofreció la zarina Catalina la Grande, conocida tanto por ser una soberana excepcional que llevaría la Ilustración y la industrialización a Rusia como por perpetuar la esclavitud del campesinado ruso.
Los vínculos de Miranda con el mundo ilustrado y los sectores más altos de la sociedad de viejo continente, sumados a su condición de masón fueron garantía para el desarrollo de una estrategia política que terminó desatando parte de las guerras de Independencia. El apoyo que obtuvo de los ingleses, dio impulso a su desembarco en las playas de Coro en Venezuela y, de paso fue el comienzo de la gran deuda externa que los países del continente empezarían a tener con el Reino Unido. El inicio exitoso de la campaña se vio opacado por la capitulación de las tropas de Miranda en la batalla de Victoria; capitulación que le valió la enemistad con Simón Bolívar y la decisión de éste último de entregarlo a los españoles. Miranda fue llevado a la cárcel La Carraca de Cádiz, en donde murió.
A Miranda se atribuye el uso del tricolor en la bandera de países como Ecuador, Venezuela y Colombia. Así mismo el nombre de nuestro país surgió del nombre con el cual él, inspirado en en la figura de Cristóbal Colón, deseó bautizar a la totalidad del continente americano, desde Mississippi hasta la Patagonia: Colombia.
Imagen: Francisco de Miranda en la Carraca, óleo de Arturo Michelena (1896). Detalle