En los personajes más destacados que interpretó hay una cosa más o menos en común: tenían personalidades al margen, era lo que se dice “gente rara”. El malo, varias veces. Eso hizo atractiva y memorable su carrera.
En homenaje a su vida y carrera presentamos algunos extractos de esta, que abarcan desde los inicios hasta el momento decisivo que fue Cóndores no entierran todos los días, película de Fracisco Norden (1983). "Siempre la realidad me ha interesado más como concepto que como una cosa que se tenga que vivir. Entonces encontré en la actuación, muy temprano, que era una forma de vivir otras vidas y no la mía propia". Pareciera él mismo estar al margen, como sus personajes.
Queda ahí anotado el primero de una serie de 8 audios que culmina con las reflexiones sobre el mencionado León María Lozano, El Cóndor más malo: "...este personaje solitario, con su asma, y de golpe tiene el aval del partido político del momento, tiene el aval del gobierno y puede hacer lo que le dé la gana". Un momento de la historia para recordar y también del cine colombiano. Un personaje que empató con la personalidad de Frank Ramírez y la forma como, desde allí, concibió el ejercicio de su profesión.
Razón para la actuar
Desaprender
Experiencia en NY
Experiencia en Los Ángeles
Regreso a Colombia – “La mala hora”
Regreso a Colombia – “El gallo de oro”
Autor: José Perilla
