Con motivo de la muerte de Ilya Ehrenburg el 31 de agosto de 1967, la emisora HJCK lo recordó mediante su programa Carta de Colombia. El escritor ruso, corresponsal de guerra publicó novelas, libros de viajes, poemas y ensayos. Jorge Zalamea, también escritor, realizó una traducción de uno de sus pasajes a la lengua castellana.
En el homenaje, Jorge Zalamea leyó un extracto de su traducción: Moriré cualquier año terrible, pero amado por todos, recordaré un susurro de periódicos. Quiero que entonces mi voz ya callada, os haga recordar no sólo el trueno sobre el Volga, sino también el rumor apenas perceptible de los árboles, un misterioso encanto verde. Con los árboles viví y sus relatos escuché, mis encinas y olivos amados que no fueron fondo, adorno ni paisaje, pues en el árbol residen la constancia y el destino. Me iré, pero ellos quedarán en guardia y lo que comencé a decir, lo concluirán ellos.
Ilya Ehrenburg trabajó en la editorial del periódico del ejército soviético, escribió para la United Press y para medios británicos. Como cronista, fue fundamental en el conocimiento que se tuvo del desarrollo de la Segunda Guerra mientras sucedían los terribles acontecimientos del Holocausto. Algunas de las obras que escribió fueron: Una calle en Moscú (1927), Fábrica de sueños (1931), España, república de trabajadores (1932), El día segundo (1934), No pasarán (1936), Guadalajara: una derrota del fascismo (1937), La caída de París (1941). La tempestad (1949), La novena ola (1952) y El deshielo (1954).
Cielo Adriana Fierro Bermúdez