Jean Francois Lyotard fue un filósofo, sociólogo y crítico literario de origen francés, reconocido por ser el artífice de la categoría posmodernismo a finales de los años setenta, con la cual designó una nueva episteme surgida en el marco de una sociedad posindustrial y que marca el fin de la modernidad y por lo tanto de los metarrelatos o grandes relatos que legitimaban instituciones y prácticas sociopolíticas en las que se fundamentaba. A continuación, una breve reconstrucción de su vida y su aporte a la filosofía contemporánea.
Años de juventud y militancia en el socialismo
Lyotard nació el 10 de agosto de 1924 en Versalles (Francia). En su juventud tuvo varios intereses de cara a su vida profesional: historiador, artista, fraile dominico, escritor. Esta última aspiración se desvaneció al publicar una novela con muy poca repercusión cuando tenía 15 años de edad. Entrada la década de 1940 se inscribió en la carrera de Filosofía en la Universidad de la Sorbona y obtuvo su titulación en 1947. El caos y la incertidumbre que se vivían en Europa al finalizar la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) llevaron a Lyotard a convertirse en un socialista acérrimo. Su activismo político lo ejerció militando en el grupo Socialismo o Barbarie entre 1954 y 1964, y en el grupo Poder Obrero, entre 1964 y 1966. Su compromiso con el activismo social y el marxismo se fortaleció durante su estancia en Argelia, donde ejerció la docencia en el transcurso de la Guerra Argelina de Liberación (1954-1962), de la que fue testigo directo y uno de sus principales detractores, dedicando sus esfuerzos a la crítica política en apoyo a los argelinos, en el marco del proceso global de descolonización.
Fotografía de Jean François Lyotard. Extraído de: : Hoyos Pérez, Bernardo (Director).(1995) Esta es su vida. [ Entrevista Informativo y de opinión]. Colombia: Señal Colombia. Archivo Señal Memoria, C1P-241740
De la militancia socialista a la formulación del posmodernismo
La desilusión de nuestro autor debido a la no realización del socialismo en Occidente y frente a lo que denominó totalitarismo en la experiencia del comunismo en Europa del Este, lo condujo a alejarse del marxismo. Tal distanciamiento comenzó a evidenciarse tras la crítica que hace a Marx en Economía libidinal (1974), en la que trata de formular un cuestionamiento a los conceptos de alienación capitalista y falsa conciencia, aduciendo que en el proceso de desnaturalización generado por el capital actúa una economía del deseo, relacionada con los impulsos libidinales. Después del icónico Mayo del 68, Lyotard asociará el marxismo como una cosmovisión más de la modernidad, una ideología hija del cristianismo que traduce la esperanza cristiana a la esfera laica, teniendo como trasfondo una teleología bastante similar.
En 1979 publicó una de sus obras más famosas, La condición posmoderna, en la que el autor da cuenta del cambio epistemológico que ocurrió a partir de la segunda mitad del siglo XX en las sociedades pos-industriales, en las que se desarrollaron nuevas tecnologías, sobre todo de la información, basadas en discursos cientificistas. Esto implicó una ruptura con la fundamentación de los saberes que habían sostenido la cultura occidental desde el siglo XVIII y con las formas y usos del lenguaje que les eran inherentes. Entre tanto, la experiencia histórica daba cuenta de la imposibilidad de los metarrelatos, entre los que destacan el de la salvación del alma en el cristianismo, el de la emancipación y la libertad por medio de las luces de la razón, el de la liberación de la explotación capitalista y sobre todo, el que relaciona una desilusión, tanto del ideal de progreso (propio de todos los metarrelatos) como del relativo al proyecto de la modernidad. Para Lyotard el proyecto de la modernidad universal fue liquidado, aniquilado, y pone como ejemplo Auschwitz, donde el conocimiento se instrumentalizó e industrializó en función de la muerte. La modernidad no cumplió el ideal de progreso que prometió y su fracaso se fundamenta, tanto en su devenir histórico, como en dinámicas propias del capitalismo en su nexo con el desarrollo de la ciencia.
Consecuentemente, el conocimiento se convirtió en una forma de discurso, en una fuerza productiva, en una mercancía. Allí radica su mutación epistémica. La necesidad de legitimación del saber científico recae entonces en las normas dictadas por el capitalismo. En la condición posmoderna no hay discurso alguno que esté sobre los demás, no hay formas de conocimiento que sean fundamento de otras. En su lugar, se generan juegos del lenguaje, cuyos diferentes tipos de frases y términos tienen una multiplicidad de usos y significados y su interpretación es variable y única en cada caso. Los juegos de lenguaje se encuentran configurados por reglas, las cuales no son equitativas y están construidas sobre un sistema que empodera a unos y quita poder a otros. Lo específico, lo local (contrapuesto a lo universal), reemplaza a la narración, lo que Lyotard designa como frase, para poder hacer referencia a la fragmentariedad de la siguiente manera: una frase es parte de una unidad, pero no lo es de una narración más grande. Por lo tanto, las frases contrapuestas y en disputa no pueden integrarse ni generar comunicación. En otras palabras, el significado de una frase o evento no puede establecerse apelando a la realidad, dado que esta consiste en un complejo de sentidos unidos a un referente, por lo cual la frase permanece indeterminada. Durante el programa radial Revista Dominical, emitido en diciembre de 1992, se hace una síntesis del libro La diferencia, escrito por Lyotard, el cual vincula la idea de este párrafo.
Parra, Gustavo (Locutor,). (1991) Revista dominical: diciembre 22 de 1991 [Informativo]. Colombia: Radiodifusora Nacional de Colombia. Archivo Señal Memoria, HJCK-DGW-200988-01-SER001CPTDGW
Entre otros aspectos vale destacar que el autor se dedicó a la docencia universitaria, impartiendo clases en instituciones como la Universidad de París VIII – Vincennes Saint-Dennis o la Universidad de París X – Nanterre. También fue fundador del Colegio Internacional de Filosofía. En sus últimos años trabajó en la tarea de profundizar nuevamente su noción de posmodernismo, dado que se suscitaron demasiados malentendidos sobre sus planteamientos, por lo cual escribió ensayos como La posmodernidad explicada a los niños y Fábulas posmodernas. Lyotard murió a consecuencia de una leucemia, el 21 de abril de 1998, en París.
Parra, Gustavo (Locutor,). (1992) Revista dominical : diciembre 20 de 1992. [Informativo]. Colombia: Radiodifusora Nacional de Colombia. Archivo Señal Memoria, HJCK-DGW-201040-01-SER001CPTDGW
Autor: Leonardo Miguel Hernández González