La Historia de El Árbol Secreto | Señal Memoria

Publicado el Mar, 15/10/2013 - 23:05
La Historia de El Árbol Secreto
 
El viento que acaba de tumbar el viejo árbol eleva por los aires, estrella contra el suelo y vuelve añicos una mesa para hacer efectos sonoros de radioteatro, como abrir y cerrar puertas y ventanas y producir pasos humanos y de animales.  La destrucción de la mesa malogra un taller de sonidos de radioteatro para niños que iba a comenzar esa mañana en el colegio. Ante la infeliz coincidencia, Luisa tiene una brillante idea para aprovechar ambos desastres: construir una nueva mesa sonora con la madera del árbol caído.
 
Los niños y el conductor del taller ponen manos a la obra y, antes de una semana, tienen una mesa nueva. Entonces, comienzan a oírse unas voces extrañas, disparatadas, a medias claras que intrigan y capturan la atención de los niños y aterran al conductor de los talleres, que las juzga como síntoma de la locura a la que lo ha llevado su pasión por el radioteatro. Pero se equivoca porque las voces son reales y parecen tener algo importante y urgente que decir.
 
En vida, el árbol caído tenía la facultad de capturar y emitir los sonidos de su entorno; en su nueva condición de madera de una mesa de sonidos, tiene que dar un mensaje crucial que, de no llegar a los oídos adecuados, podría significar el fin. ¿El fin para qué o para quién? Eso es lo que los niños dilucidarán ayudándole a la mesa a dar su mensaje, para lo cual deberá superar una serie de obstáculos, entre ellos, su enrevesada manera de hablar y el antagonismo del conductor de los talleres, que no quiere saber nada de esas voces.
 
Al árbol le queda un hilo de voz y un débil aliento de vida; los niños se encargarán de darle nuevo bríos y de descifrar aquello tan gracioso y enigmático que una y otra vez intenta decir.
 
Historia y Libreto: Carlos Fernández
 
 
 
 
 
 
 
Fecha de publicación original Mar, 15/10/2013 - 23:05