Por Luis Alfonso Rodríguez Norato
Tres naciones se unían en la nostálgica imagen de un vehículo suspendido en las cuerdas de una grúa naval sobre la cubierta de un barco. Estados Unidos con el escenario de fondo de los rascacielos de Nueva York desde uno de sus puertos comerciales, Ecuador con su navío de carga Ciudad de Quito que guardaría en sus bodegas el delicado envío y Colombia con su nombre inscrito sobre uno de los costados de una especie de autobús que no llevaría pasajeros, sino los sueños tecnológicos de un país que esperaba entrar en la era de la televisión.
Corría el año 1954, días después el puerto de Buenaventura recibiría el Dumont Telecruiser, la unidad móvil que haría realidad aquella primera señal televisiva en Colombia, donde el entonces mandatario Gustavo Rojas Pinilla inauguró una transmisión que hasta el día de hoy no se ha interrumpido.
Una inversión de 10 millones de pesos del Ministerio de Hacienda de la época para el proyecto televisivo nacional incluía en su presupuesto la adquisición del innovador vehículo. Fue encargado a la compañía americana Dumont Labs ubicada en New Jersey, líder en la invención y fabricación de equipos y elementos para radio y televisión. La empresa fundada por Allen Balcom DuMont en 1931 alcanzó reconocimiento por la creación de los tubos de rayos catódicos, fundamentales para televisores y aparatos radiales durante varias décadas. La compañía cerró sus operaciones en 1956, no sin antes fabricar para el país la icónica móvil y un número considerable de televisores para los hogares colombianos que inauguraban su discurrir televisivo.
El costo aproximado de una unidad de este tipo, completamente equipada para principios de la década de los años cincuenta del siglo pasado, era del orden de los U$95.000.oo dólares americanos, alrededor de unos $240.000.oo pesos colombianos de la época. Si consideramos que el salario mínimo podía estar en $120.oo pesos y un modelo familiar de automóvil llegaba a los $5000.oo pesos, la Dumont Telecruiser suponía una importante inversión.
Las primeras transmisiones en las que intervino la móvil tuvieron como protagonistas, en primer lugar, como es de suponer, a su promotor el general Gustavo Rojas Pinilla en el discurso inaugural del 13 de junio de 1954, y posteriormente, en un lejano y temerario lugar de emisión, a las carreras de caballos en el Hipódromo de Techo de Bogotá. En adelante las transmisiones llegarían cada vez desde lugares más remotos. Por ejemplo, el cubrimiento de una manifestación de apoyo al gobierno en Girardot, Cundinamarca, meses más tarde. Pero si de hechos importantes que cubrieron este tipo de vehículos hablamos, una unidad del mismo tipo que la colombiana, por ejemplo, fue la encargada de llevar al mundo las imágenes del asesinato del presidente Kennedy en Dallas en noviembre de 1963 operando para la cadena de televisión ABC.
Foto: Archivo Señal Memoria de RTVC Sistema de Medios Públicos - Todos los derechos reservados
Actualmente la Dumont Telecruiser permanece incólume ante el paso de los años y se yergue reluciente, luego de su restauración y jubilación, en la esquina sur occidental de las instalaciones de RTVC en Bogotá. Tras de ella las nuevas tecnologías, de las cuales una vez estuvo a la vanguardia, siguen transmitiendo para Colombia y el mundo la utópica tarea de dar testimonio de la vida, los sueños y la identidad de toda una nación.
Foto: Sandro Sánchez para Archivo Señal Memoria de RTVC Sistema de Medios Públicos - Todos los derechos reservados