Encarnado por Gustavo Angarita, el célebre siberiano y sus intrigas cautivaron a los televidentes colombianos en 1980
Realizada por Producciones Punch, dirigida por Antonio Corrales y protagonizada por Gustavo Angarita, la serie “Rasputín”, estuvo al aire entre 1980 y 1981 de lunes a viernes a las 10 de la noche y siguió los pasos del hombre que llegó a ser el poder en la sombra durante el reinado del Zar Nicolás II de Rusia.
Gracias a su elocuencia y los “milagros” que ejecutaba en favor de la zarina, este enigmático e intrigante personaje histórico instaló a Gustavo Angarita en la memoria colectiva de una nación acostumbrada a ver en televisión grandes obras de la dramaturgia universal.
Gustavo Angarita dejó de estudiar Filosofía y Letras en la Universidad Nacional en la década de los sesentas y se matriculó en la Escuela Nacional de Arte Dramático, en donde fue compañero de Carlos “el gordo” Benjumea y Luis Fernando Orozco.
Trabajó con Santiago García en el grupo de teatro de la Universidad Nacional en el polémico montaje de “Galileo Galilei” de Bertolt Brecht y fue parte del grupo que, junto con ese director, fundó en 1966 “La casa de la cultura”, que luego se transformaría en el célebre “Teatro La Candelaria”.
Después de vivir un tiempo en París, regresó a Colombia y se incorporó al TPB, Teatro Popular de Bogotá, grupo al que pertenecía cuando fue elegido para encarnar a Rasputín, un personaje que marcó para siempre su carrera que incluye múltiples títulos en teatro, televisión y cine colombianos.
En este fragmento de un programa especial realizado con motivo de los 50 años de la televisión en Colombia que se conserva en el archivo de RTVC Sistema de Medios Públicos, el Rasputín de Gustavo Angarita vuelve a la vida para refrescar la memoria de los colombianos.
