Por Alejandra Varela
Doce años después de la publicación del Manifiesto Nadaísta, el poeta Gonzalo Arango, el principal representante de este movimiento literario en Colombia, desiste de su vocación nihilista para adentrarse en los caminos de la espiritualidad.
Su fe en Jesucristo lo cambió por completo, lo transformó en un escritor lleno de esperanza, y de un misticismo particular, que sorprendió profundamente a quienes lo admiraban como el profeta nihilista y contestatario, que años atrás, en su máquina de escribir renegaba de la tradición, pacata y solapada de sus días.
Dos años antes de su fallecimiento, fue entrevistado junto a su novia Angelita, una cantante inglesa que conoció en la Isla de San Andrés y con la que compartió los últimos siete años de su vida. Allí, podemos escuchar en su voz, un testimonio vivo no sólo del poeta lleno de esperanza, sino además, del poeta enamorado que compone canciones como ofrenda de su unión con Angelita aquel tesoro que halló.
Créditos de la foto: www.gonzaloarango.com
