Así como en la Biblioteca de Alejandría, hace más de 2.000 años, se buscó recopilar todo el conocimiento humano, en Señal Memoria buscamos preservar el patrimonio cultural de Colombia en forma del archivo de TV y radio públicas. Exploramos algunas cifras del Archivo Señal Memoria y qué significan, así como los procesos que funcionan en nuestro interior. ¿A cuántos años equivale ver los documento que reguardamos? ¿Qué pasa con los soportes físicos luego de que los materiales son digitalizados?
Querían recopilar todo el saber humano. Y me refiero a todo. A mediados del siglo III A.C., en Alejandría —entonces una gran ciudad de la costa mediterránea de Egipto, bajo el dominio griego—, su biblioteca tenía cerca de 500.000 libros. Y la meta era tener más y más: que el palacio que la albergaba estuviera lleno de conocimiento; tradiciones egipcias, saberes judíos, himnos de Zoroastro y más: no había límite. Por eso cuando se quemó la Biblioteca, probablemente durante una batalla en el 47 A.C. por el trono de Egipto, la pérdida no fue solo para esa comunidad ni para ese momento, sino para toda la humanidad.
Hemos soñado, desde distintos horizontes, con una biblioteca universal y total que reúna, como imaginó Jorge Luis Borges en el cuento “La Biblioteca de Babel”, “todo lo que es dable expresar, en todos los idiomas”. Parece ser una certeza absoluta: lo que pensamos y creamos debe preservarse a medida que pasa el tiempo, porque estamos reflejados en ello, en esa memoria. Y aunque su ambición es mucho más modesta que la que planteó Borges o la que se llevó a cabo en la Biblioteca de Alejandría (y tantas más a lo largo de la historia), esta es parte de la motivación y de la razón de ser de Señal Memoria.
¿Qué hace Señal Memoria?
En Señal Memoria salvaguardamos el patrimonio audiovisual y sonoro de los medios públicos de Colombia. El Archivo guarda los registros emitidos por la Radio Nacional desde 1940 (aunque en algunos registros hemos hallado copias de documentos sonoros desde 1914) y por la televisión pública nacional desde 1954. Además, conservamos material fílmico que data hasta de los años 40 y algunas fotografías que registran la historia de la TV y la radio nacionales de la segunda mitad del siglo XX y estos primeros años del siglo XXI. Como lo ha declarado la Unesco, es vital proteger el patrimonio porque puede ser un insumo para nuevas obras literarias, por ejemplo, así como dar a conocer la historia y las características de las diferentes regiones de este país.
En general, entonces, Señal Memoria preserva, conserva y circula los documentos de la televisión y radio públicas de Colombia. El Archivo Sonoro se encarga de los registros de la Radio Nacional, la HJCK y Todelar; el Archivo Audiovisual, del de la televisión nacional. Nuestra estrategia está estructurada por procesos de conservación (protección de los soportes y del contenido visual y sonoro), la gestión de nuestras colecciones (identificar el material y clasificarlo en el catálogo), la investigación del archivo (producción de conocimiento a partir de los documentos) y la circulación de él (compartir el contenido y los eventos que surgen a partir de este). Todo esto lleva, al final, a salvaguardar y difundir el patrimonio que protege RTVC.
¿A qué equivale nuestro archivo?
Adentrémonos más en los procesos de Señal Memoria. Más precisamente, adentrémonos en algunas cifras. En nuestro Archivo Audiovisual hay 303.000 materiales digitalizados y 7.300 restaurados. Esto incluye formatos diversos: magnético, fílmico, óptico y fotográfico. Y en total, el archivo está compuesto por más de 600 mil documentos. De hecho, es una cifra no tan lejana a la de la mítica Biblioteca de Alejandría, pero solo concentrada en Colombia. O, dicho de otra forma, si cada uno de esos documentos fuera una persona, el Archivo de Señal Memoria sería casi como la ciudad de Manizales en su población.
Quizás te preguntes cómo se conserva todo este material. Principalmente, tenemos cintas LTO6 y LTO8 para almacenarlo. Las primeras tienen una capacidad de 2.5 TB cada una; las segundas, de 12 TB. Y en total hay 1450 cintas LTO6 y 103 LTO8. Eso quiere decir que en estas cintas hay un total de 4.86 petabytes, o sea 4.861 terabytes, o sea 4.861.000 gigabytes. Esa cifra es exorbitante, por lo que hay que ponerla en contexto. Si un computador portátil normal tiene alrededor de 250 GB, se necesitarían 19.444 computadores para almacenar este archivo.
Por si el peso no es una forma muy clara de abordar este tema, hablemos de la duración de los materiales. En promedio, un video de una hora pesa 25 GB, por lo que en el archivo hay 194.440 horas de video, o 8.101 días, o 270 meses o 22 años. O sea que si empezaras a ver el archivo desde el minuto 0 de tu nacimiento, cuando acabaras serías una persona adulta lista para graduarse de la universidad. Esos 4.86 PB equivalen a, por ejemplo, a ver 116.664 veces la película Sumas y restas de Víctor Gaviria o a escuchar 265.145 veces Fijación oral de Shakira.
¿Y los formatos originales? ¿Y el Archivo Sonoro?
Más allá de los procesos de digitalización, en Señal Memoria también conservamos los soportes originales de los diferentes formatos magnéticos, ópticos, fílmicos, fotográficos y nativos digitales. Hay alrededor de 450.000 documentos en soporte físico. De ellos, 230.000 ya han sido intervenidos por procesos de limpieza externa y digitalización y 200 mil han sido catalogados.
Y no podríamos acabar sin sumergirnos por un momento en nuestro Archivo Sonoro. Hay formatos varios: cinta de carrete abierto, disco analógico de audio, discos compactos, casetes, cintas de audio digital y minidisc. En total, son 40.037 horas de audio. Si el desplazamiento diario de ida y vuelta al trabajo de los bogotanos es de entre 2 y 2 horas y media, serían cerca de 20.000 días los que te demorarías escuchando nuestro archivo en el carro o en el bus; esto es, casi 55 años en los que no tendrías que pensar ni un solo día qué canción o podcast escuchar. Y esto ni siquiera toma en cuenta el archivo sonoro de la HJCK y Todelar: ahí ya necesitarías más de una vida para escucharlo todo.
Tanto en video como en audio, en Señal Memoria hemos hecho un trabajo importante hasta ahora. Pero todavía hay muchos soportes por restaurar, digitalizar y difundir. Eso es lo emocionante: queda mucho por hacer para seguir cumpliendo nuestra misión.
Autor: Santiago Cembrano
