Los viajeros recorrieron el mundo para explorarlo y darlo a conocer a través de sus escritos. Sus orígenes y motivaciones fueron diversos; algunos eran naturalistas contratados por un gobierno para emprender una expedición científica; otros tenían la misión de levantar un mapa y algunos más emprendían una larga travesía para conocer nuevas regiones o culturas. Muchos terminaban estableciéndose y fundando empresas.
Los viajeros dejaron un valioso registro de sus travesias y experiencias; a partir de la Ilustración y de las guerras de independencia, los libros de viajes se popularizaron y se convirtieron en un medio eficaz para conocer el mundo y los territorios nacionales.
Viajeros
Alexander von Humboldt llegó a Cartagena de Indias en 1801, luego de que una tormenta desviara su barco. Fue un naturalista de una sabiduría extraordinaria. Los viajes de exploración le llevaron de Europa a América del Sur, parte del actual territorio de México, Norteamérica, las Canarias y a Asia Central. Se especializó en diversas áreas de la ciencia como la etnografía, antropología, física, zoología, ornitología, climatología, oceanografía, astronomía, geografía, geología, mineralogía, botánica, vulcanología y el humanismo. Humboldt también dejó memorias como viajero y como geógrafo.
Auguste Le Moyne, Isaac Holton, Ernest Rothlisberger, Mutis y Humboldt son solo algunos de los nombres que nos dejaron en sus memorias y dibujos, instrumentos invaluables para reconstruir el pasado, redescubrir la naturaleza, nuestras riquezas, la geografía humana, social y natural tal como lo entendieron aquellos aventureros.
Imagen: August Le Moyne, viajero cargado por dos indígenas en las montañas de la provincia de Antioquia. Colección Museo Nacional de Colombia