Ficha Técnica
El 29 de noviembre de 1947 la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Resolución 181, que proponía la partición de los territorios de Palestina en dos estados; uno judío y otro árabe. Mientras que Jerusalén quedaba sometida a un régimen legal y político internacional especial. De acuerdo con la resolución, hasta el momento solo se ha establecido Israel, mientras que Palestina solo cuenta con el reconocimiento de algunas naciones sin formalizar la consolidación de un Estado.
Aunque esta resolución fue aceptada por la comunidad judía, fue rechazada por los países árabes y los palestinos, quienes se opusieron a la creación de un Estado judío en su tierra. El conflicto resultante provocó una serie de contiendas e incursiones armadas de ambas partes, desplazamientos forzados principalmente del pueblo palestino y una ocupación prolongada de los territorios en disputa por parte de las fuerzas armadas de Israel (que continúa hasta el día de hoy).
El Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino se conmemora cada 29 de noviembre para recordar las luchas y los sufrimientos del pueblo palestino, reafirmar el compromiso global con su derecho a la autodeterminación y dignificar a miles de víctimas que ha dejado la lucha por el territorio de Palestina.
A pesar de las diversas iniciativas de paz que han sucedido durante los últimos cuarenta años, la lucha por el territorio sigue sin resolverse y la esperanza de una solución concertada se desvanece cada vez más. El 7 de octubre de 2023 fuerzas radicales de Palestina incursionaron en territorios ocupados por Israel, desencadenando la más dura de las represalias que hasta la fecha cuenta con más de 40 000 fallecidos durante el último año de confrontaciones.
La comunidad internacional se encuentra dividida, y mientras algunos países y organizaciones continúan luchando por los derechos de los palestinos, otros respaldan u omiten las consecuencias de las acciones bélicas de Israel. No obstante, esta conmemoración sirve para reflexionar sobre los derechos vulnerados al pueblo palestino y sobre la necesidad moral, ética y política de solidarizarnos con las víctimas que ha dejado esta lucha por una tierra que podría ser un espacio compartido en condiciones de justicia, paz y solidaridad.
Por: Iván Darío Romero Vega