Ficha Técnica
Un hecho tan presente en la historia de Colombia como la Guerra de los Mil Días, dejó un sinnúmero de hechos curiosos y con consecuencia directa en la vida del país, incluso hasta la actualidad. Las armas utilizadas estuvieron presentes en el nacimiento de las guerrillas de los años 60, el indiscriminado despliegue de violencia e incluso el exacerbado consumo de licor en el entorno bélico son solo algunos de estos aspectos.
Las armas
Las utilizadas por los rebeldes liberales fueron en gran parte desenterradas. Estas habían sido escondidas en la anterior Guerra de 1895 y, por supuesto, a falta de plástico para protegerlas de los elementos, se impregnaban totalmente de grasa animal. Para usarse, estos fusiles se hervían en agua para quitarles esos residuos y hacerlas funcionales.
Las ametralladoras
El armamento está en permanente evolución. Así fue con las ametralladoras, que en plena Guerra de los Mil Días no eran elementos que un solo soldado llevara a todo. Eran más parecidas a un cañón con grandes ruedas. La ametralladora Maxim era el modelo por excelencia que poseía en muy pocas cantidades el ejército gobiernista.
Los ejércitos
En el caso de los liberales los ejércitos se conformaron de la clientela de cada uno de los generales. Así, básicamente, general era todo aquel que pudiera conseguir una determinada cantidad de hombres, pertrechos y armamento capaz de llevar a cabo una operación militar. No necesariamente el que tenía este rango se destacaba por su amplia carrera o formación militar.
La Rusia o el zorro y las gallinas
Después de la Batalla de Palonegro, esta fue la acción bélica, por no decir masacre, que más muertos dejó. En la hacienda conocida como La Rusia (Tolima) el ejército liberal masacró entre 500 a 1000 soldados del ejército gobiernistas en la noche del 31 de agosto de 1901. Gran parte de los muertos fueron "pasados a machete" en una acción que quedó en los anales de la historia de este conflicto, pero rara vez recordada. El responsable de esta acción fue el rebelde Tulio Varón, quien describió la operación como "el zorro que entra al corral, mata a las gallinas y huye".
El trago
El consumo de bebidas alcohólicas fue de vital importancia para los dos ejércitos durante la Guerra de los Mil Días. Este fue la infusión preferida de las batallas y responsable de miles de muerte en estas. Gracias al alcohol miles de hombres marcharon a su muerte independientemente del rango que tuvieran.
Este fragmento de la serie Rafael Reyes, vencedor de imposibles, reflexiona en torno a las consecuencias de la guerra civil más devastadora que vivió Colombia en su historia.
Por: Javier Hernández