Durante la última década, ha habido algunos esfuerzos para sacar las tradicionales conmemoraciones del 20 de julio de Bogotá o incluso de las ceremonias convencionales del te deum y el Desfile Militar. En 2009, por ejemplo, el Desfile Militar llegó a Tame, Arauca, y cuatro años después a San Andrés. En ese mismo periodo, el Archipiélago y Popayán se llenaron de música para celebrar también el folclor colombiano.
Hay dos tradiciones que el gobierno nacional practica cada 20 de julio, Fiesta Nacional de Colombia: un te deum en la Catedral Primada, un desfile de las tres armas de las fuerzas militares y la policía. En la gran mayoría de ocasiones, estos eventos se han realizado en Bogotá, mientras que la celebración se centra en estos actos oficiales. Toda práctica repetida en el tiempo, por tradición o costumbre, no está exenta de críticas por parte de un sector de la sociedad. ¿Por qué reducir la celebración de un país diverso a una ceremonia católica? ¿Por qué la conmemoración de un acontecimiento civil se celebra con un desfile militar? Se preguntan unos ¿Por qué reducir esos eventos a Bogotá? Se preguntan otros…
Es así como nuestro archivo también revela algunas alternativas a esas costumbres aparentemente arraigadas dentro de los eventos del 20 de julio, especialmente de la última década. Ya sea porque se sacan los desfiles y las cámaras de Bogotá o porque se proponen otro tipo de eventos conmemorativos, nuestra fiesta nacional eventualmente ha querido responder a esos reclamos de descentralización y reconocimiento de la diversidad que también hacen parte de la cultura política fundada hace dos siglos.
Desfiles por fuera de la capital
En 2009 el gobierno nacional decidió llevar el tradicional desfile militar del 20 de julio a Tame. La elección no era gratuita, pues en ese municipio del departamento de Arauca se dio inicio a la Campaña Libertadora de 1919, con el encuentro de las tropas de Bolívar y Santander. Es así como, además de la tradicional marcha de las escuelas y divisiones del ejército, la armada, la fuerza aérea y la policía, se realizó ante el presidente Álvaro Uribe una parada con uniformes de diferentes etapas de la historia de Colombia: la guardia virreinal, los húsares de la Guerra de Independencia, los batallones de la Guerra de los Mil Días, la Guerra de 1932 contra el Perú, la Guerra de Corea y las misiones de la ONU en el Sinaí.
Desfile del 20 de julio en Tame, Arauca, 2009 (Versión sin restaurar)
Cuatro años después, en medio de la controversia por el fallo de la Corte de La Haya que estableció una frontera marítima en el Caribe desfavorable para los intereses de Colombia, el gobierno de Juan Manuel Santos decidió llevar a la isla de San Andrés el tradicional desfile militar. Dentro de esa ceremonia, presentamos el fragmento en el cual aparecen la Escuela Naval de Cadetes Almirante Padilla, con su tradicional conjunto de gaitas, introducido por el oficial inglés Ralph Douglas Binney, fundador de esta escuela en 1935.
Desfile de la Escuela Naval de Cadetes en San Andrés, 2013 (Versión sin restaurar)
Concierto y fiestas
Pero no solo se ha tratado de sacar el desfile militar de las calles de Bogotá, también ha habido ocasiones en las que el 20 de julio se convierte en una fiesta para celebrar la diversidad cultural del país. Un ejemplo también ocurrió en San Andrés en 2009, mientras en Tame desfilaban las Fuerzas Armadas. En estas imágenes registradas por RTVC, los colegios y las instituciones de educación superior de la isla hacen una parada para evocar los trajes típicos de la región, especialmente las danzas tradicionales de salón traídas por los británicos y conservadas por la población raizal.
Desfile de comparsas juveniles en San Andrés, 2009 (Versión sin restaurar)
Para el año 2012, los festejos del 20 de julio coincidieron con el centenario del natalicio del compositor bolivarense Lucho Bermúdez. Por ello, el gobierno realizó un concierto-homenaje en el coliseo de la Universidad del Cauca, en Popayán, que contó con la presencia de agrupaciones musicales infantiles y juveniles como los Niños Vallenatos de Andrés Eliécer “El Turco” Gil, la Orquesta Caucana de Vientos y el Coro y Orquesta Desepaz de Cali. Precisamente, de esta última entidad era la niña Luisa Alejandra Martínez, quien inició la ceremonia con una interpretación a capela del Himno Nacional.
Himno Nacional interpretado por Luisa Alejandra Martínez, 2012 (Versión sin restaurar)
Autor: Felipe Arias Escobar