¿Qué es una mina antipersona?
Los avances tecnológicos se han visto con claridad con el paso de las guerras: aviones, tanques, armas de fuego, submarinos y todo tipo de explosivo que tiene como objetivo acabar con cualquier amenaza de manera eficiente y efectiva.
Entre los artefactos que han tenido gran acogida se encuentran las minas. Estas armas pueden activarse por sí solas y son trampas capaces de neutralizar a varios enemigos en una sola explosión. Además, su uso ya es habitual dentro del marco de las guerras porque es un arma efectiva para detener el avance de la infantería (soldados de pie) y la caballería (tanques y carros blindados) de los adversarios.
Una mina por sí sola no es efectiva. Así que se deciden plantar varias que cubren el perímetro de una base o de un territorio de interés para que este detenga el avance del enemigo. A esto se le llama "campo minado" y suele ser señalizado para evitar incidentes con civiles o con los responsables de su plantación. No obstante, para mantener el elemento sorpresa, se obvia cualquier indicación con el fin de que cause mayor daño a las tropas del objetivo enemigo.
¿Existen regulaciones para el uso de esta arma? Afortunadamente, sí. Para que esta sea empleada en la guerra sin caer en castigos ligados a acuerdos internacionales, se requiere que el explosivo pueda ser destruido a control remoto. Usualmente, estas armas tienen fecha de expiración, ya que, con el paso del tiempo, presentan funciones defectuosas y es mejor destruirlas para evitar accidentes.
Desafortunadamente, muchas minas no cumplen este requisito y se mantienen activas con el pasar de los años. En consecuencia, se transforman en un arma silenciosa y duradera que, en el largo plazo, puede estallar repentinamente o ser activada por un civil.
Por este motivo, las distintas instituciones y organizaciones internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Cruz Roja han solicitado a todos los actores armados abstenerse de emplearlas en combate.
Ahora, se observa una emisión del Noticiero de las Siete N7 sobre un foro contra las minas antipersonales organizado por la ONU. Lo que demuestra es que las guerras cada día afectan más a los civiles que murieron o quedaron permanentemente mutilados por el uso de estos artefactos.
Orozco Tascón, Cecilia (Directora). (1997). Noticiero de las siete N7 : 1983-2001: Emisión del 1 de diciembre de 1997. Bogotá D. C.: Programar Televisión. Archivo Señal Memoria, BTCX60-064375.
Fue tal el impacto y recrudecimiento que provocaron las minas en todo el mundo que la ONU pidió a sus miembros firmar los Tratados de Ottawa y la Convención sobre la prohibición de minas antipersonales en 1997.
¿Por qué esto es importante? Es un acuerdo internacional con un sustento jurídico que prohíbe el uso de minas antipersonales, es decir, directamente contra un ser humano y solicita el desarme y remoción de estas. Cabe mencionar que las minas antivehículos (como tanques o carros blindados) están absueltas de estos acuerdos.
¿Cuál es el panorama de estos artefactos en Colombia?
El uso de explosivos ha sido una de las armas predilectas de organizaciones armadas que no tienen las capacidades bélicas para enfrentarse directamente a las Fuerzas Militares de un país. Por eso, varios grupos guerrilleros recurrieron al uso de artefactos capaces de causar daño físico a infraestructuras y a personas en un solo ataque.
En el caso de las minas, son herramientas que cobraron relevancia en los años 90 y fueron plantadas en varias partes del país, para proteger áreas estratégicas o arremeter ataques a miembros de la Fuerza Pública que podrían no solo afectarlos física sino también psicológicamente.
A partir del año 2002, la marea cambió a favor de las Fuerzas Militares con la activación del Plan Patriota, el cual desarrollaba operaciones sostenidas que impactaron negativamente a los grupos armados organizados que perdieron el control de cientos de territorios que antiguamente administraban. Sin embargo, para frenar el avance de los militares, varios grupos recurrieron al uso de esta arma y, en consecuencia, las cifras de víctimas (tanto civiles como militares) por minas antipersonales aumentó considerablemente a partir del 2005.
A continuación, veremos un documento filmado por guerrilleros sobre la preparación de bombas para el desarrollo de atentados terroristas. Esta grabación inédita fue empleada por el equipo de producción del Noticiero de las Siete N7 para demostrar el uso de armas no convencionales por parte de algunos grupos armados.
Orozco Tascón, Cecilia (1998). Noticiero de las siete N7 : 1983-2001: Imágenes de unas pruebas y curso de explosivos por un frente de las FARC. Bogotá D.C.: Programar Televisión. Archivo Señal Memoria, BTCX60-064449.
Seguidamente, hay otro documento audiovisual que muestra un campo minado establecido por el frente “José María Becerra” del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en Jamundí, Valle del Cauca. El letrero le advierte a la población no ingresar a esa área y evitar accidentes con esta arma. Se desconoce si las minas plantadas podían destruirse con control remoto o si solo se activan cuando sienten presión en alguno de sus mecanismos.
Orozco Tascón, Cecilia. (1998). Noticiero de las siete N7 : 1983-2001: El ELN advierte sobre la instalación de minas antipersonas en el municipio de Jamundí, Valle. Jamundí-Valle: Programar Televisión. Archivo Señal Memoria, BTCX60-064429.
El objetivo de las minas fue proteger bases o retaguardias estratégicas del avance territorial de potenciales enemigos: caer en un campo de minas podría herir o acabar simultáneamente con la vida de varios actores armados. Adicionalmente, esto provocó que las fuerzas enemigas se detengan con el fin de evitar el mayor número de bajas y suscitó miedo e inseguridad para los combatientes que tendrían que progresar con mayor lentitud o se negaron a continuar.
Descontaminando el territorio
Remover las minas antipersonales es uno de los grandes desafíos que tiene el Estado colombiano durante las próximas décadas. Se estima que hay miles de estas armas enterradas en la tierra o enlazadas entre los árboles, esperando quién será su próxima víctima.
De esta manera, se han creado brigadas especiales que se encargan de destruir estas minas, como las brigadas de desminado humanitario del Ejército Nacional. Mientras tanto, organizaciones que apoyan y visibilizan a las víctimas de estos artefactos, buscan reconstruir el tejido social de las comunidades vulneradas.
Finalmente, se aprecia a Marina Arango, representante de la Asociación de mujeres del nororiente antioqueño, en el Foro de minas antipersonas que se llevó a cabo en el Congreso de la República, hablando sobre el proceso que adelantan en Cocorná a través de un programa de prevención frente a las minas antipersonas, el acompañamiento a las víctimas y la ayuda en su recuperación y sanación del tejido en comunidades directamente afectadas por el conflicto armado.
Congreso de la República de Colombia. Foro Internacional Minas Antipersonales en el Capitolio Nacional. Bogotá D.C: Inravisión, Señal Colombia.. Archivo Señal Memoria. VHS-140055.
De acuerdo con las cifras del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH), se reportaron 1228 víctimas en 2006. Para 2019, sólo se registraron 82 casos de personas lesionadas (Bayron Bedoya, 2019). La Presidencia de la República ha informado sobre 73 casos en lo transcurrido del 2024 en los departamentos de Antioquia, Meta, Nariño, Norte de Santander y Caquetá, que presentan mayor frecuencia de personas afectadas por estas armas.
Por: Jaime Cimadevilla Acevedo