Ficha Técnica
Antonio Nariño nació en Bogotá el 9 de abril de 1765 y falleció en Villa de Leyva el 13 de diciembre de 1823. Mucho se ha hablado a lo largo de la historia de este prócer de la nación, desde su profundo amor hacia los libros, hasta el uso de su imprenta para la impresión de los Derechos del Hombre que tradujo del francés al español.
Sin embargo, poco se dice sobre la influencia de la logia de los masones y el intrínseco papel que jugaban dentro de ella las ideas de libertad, orden e igualdad. La logia masónica fue establecida en 1717 en Londres, y sus principios se basaban en el cristianismo, mezclado con la doctrina filosófica del estoicismo. En esta última, se resalta que todos los hombres son iguales, libres y capaces de alcanzar la virtud ¿Les suena familiar a los derechos del hombre? Pues sí, parte de ser masón era obedecer una ley moral, es decir, que sus actos debían ser juzgados por su propia consciencia.
Al igual que Nariño, los masones se regían bajo la idea de que era fundamental ser hombres activos, estudiosos, amantes de la verdad y justos al momento de ejercer sus decisiones, perfeccionando cada día más su ser, por medio del trabajo y superando sus defectos. Pero, ¿en dónde podría ser así de libre Antonio Nariño? Y, aún más importante, ¿cómo logró expandir estas ideas?
Pues este mensaje político y filosófico del prócer comenzó a materializarse con las publicaciones clandestinas y el auge de diversas sociedades secretas, entre estas, la de Nariño con su socio francés, Luis de Rieux, un médico con el que fundó el Arcano Sublime de la Filantropía, una sala de lectura que a la vez sirvió de tertulia a miembros de la alta sociedad de Santafé.
Para complementar estos ideales de libertad, es curioso que el mismo Nariño a parte de ser un reconocido bibliófilo, contrabandeaba libros con el fin de que su tertulia tuviese de qué hablar mientras que el virreinato buscaba la manera de que esas ideas revoltosas no llegaran a estas tierras. Por esta razón, hoy recordamos a Antonio Nariño el masón con este fragmento de la miniserie Nariño, el precursor que hace parte de Revivamos Nuestra Historia en donde se hace referencia a este rasgo de su pensamiento.
Por: Valentina Mena
