Ficha Técnica
Si vive en una ciudad de Colombia, quizá usted o alguna de las personas que conoce acostumbra ir al cine con su familia el día después de Navidad. Están quienes empiezan el día en horas de la mañana y quienes lo hacen pasado el mediodía, pero tarde o temprano se encuentran en los centros comerciales para darle a ese día festivo un toque de entretenimiento proyectado.
Esta práctica, que quizá resulta arriesgado llamar tradición, puesto que es más una lógica de consumo global que un ritual cultural, toma un carácter particular en Colombia. Aunque no se remonta a un momento en específico que sea de común conocimiento, se puede afirmar que se relaciona con algunos sucesos a rememorar.
Un 25 de diciembre hace treinta años se estrenaba la que es para muchas personas la película más representativa del cine colombiano, La estrategia del caracol, su acogida fue masiva, con taquillas llenas de largas filas. El carácter popular de su historia, que mezclaba drama y comedia para transmitir mensajes profundos a través de personajes icónicos, sería un antecedente del característico cine de comedia popular, que más tarde explotaría el productor Dago García, quien acostumbra a estrenar sus películas en esta misma fecha, junto a algunas de Hollywood.
La estrategia tuvo su premier el 5 de diciembre en el Centro Comercial Andino y se estrenó en el teatro El Embajador, uno de los teatros clásicos del centro bogotano, construido en 1968 y remodelado en 2004 para dar lugar a seis salas de Cine Colombia que se mantienen actualmente.
Así como El Embajador, existían en el centro de la ciudad otros grandes teatros de cine que eran junto a los teatros de barrio los principales lugares para ver películas hace unas décadas. El primero de ellos se remonta a mucho antes: en diciembre de 1912 se proyectó la primera función en el Salón Olympia, con la película italiana L'ultimo dei Frontignac, curiosamente también una historia de conflicto entre clases.
Posteriormente, como lo recuerda el siguiente fragmento del programa Siglo XX cambalache siglo XXI, estos teatros fueron desapareciendo ante la competencia insostenible contra nuevos modelos de negocio y posteriormente, contra los teatros multisalas de los centros comerciales.
Por: Camilo Fernández Jaimes