El objetivo del agua | Señal Memoria

Piensa en el agua. En su presencia total en tu día a día: en tu alimentación y tu limpieza, en tus vacaciones y en tu transporte. Se ha repetido tanto que ya la frase está trillada, pero es que es sencilla y certera: el agua es vida. Y, como todo lo vivo, el agua puede morir. Por eso hoy es el Día del Agua, que, según las Naciones Unidas, cuya asamblea decretó esta fecha en 1993, es una oportunidad única para unirnos en favor del agua y avanzar para cuidarla, para nosotros en el presente y para la Tierra en el futuro. 

Más que una oportunidad, yo diría que nos enfrentamos a una emergencia. Distintos conflictos se relacionan con la falta de agua. Unos son más obvios, como la salud, el hambre y los desastres naturales, pero otros muestran cómo el agua, incontenible, se extiende por toda la estructura humana: la desigualdad de género y la guerra, por ejemplo. Y para ser más precisos, acá van algunas cifras claves: una de cada tres personas en el mundo no tiene agua potable; la vida de hasta 360.000 bebés puede salvarse con un buen sistema de saneamiento y suministro de agua; para 2040, la demanda mundial de agua incrementará en 50%. Repito: es una emergencia. 

En 2015, como parte de la Agenda 2030, surgió el Objetivo de Desarrollo Sostenible 6: que todo el mundo tuviera agua y saneamiento para 2030. Hoy estamos lejos de esa meta. Y para alcanzarla debemos pensar más allá de las decisiones individuales aisladas. Si nos entendemos como parte de un ecosistema, o varios, podemos comprender la vitalidad del agua. Para esto, no tenemos que hacer otra cosa que mirar hacia los ríos, las venas de un territorio, que oxigenan su agua y la mantienen en movimiento. En este caso, prestémosle atención a nuestro principal río, el que atraviesa el país desde el Macizo Colombiano hasta Bocas de Ceniza: el Magdalena. 

La fundación Alma se ha dedicado a defender el río Magdalena, a recuperar esta fuente. Sobre este tema habló Juan Carlos Gutiérrez en 2015, entonces subdirector de Alma, con el programa Colombia Responsable. De las declaraciones de Gutiérrez destaca su mirada amplia y cómo se acerca a esta pregunta como un proyecto de país. Desde esa perspectiva, que considera la historia, la cultura y la ecología como saberes complementarios para cuidar el agua y sus cauces, es posible identificar pistas para acercarnos al Objetivo de Desarrollo Sostenible 6. Para ayer es tarde.