El sueño de Martin Luther King | Señal Memoria

En Do The Right Thing, la película de Spike Lee de 1989 que retrata el día más caliente del verano en Brooklyn, Radio Raheem tiene una manopla en cada mano: una reza “LOVE” (amor) y la otra “HATE (odio). Parece que el título del filme nos planteara una elección entre ambas, sin revelar la respuesta. Al final, antes de que toda la pantalla quede negra luego de una de las grandes obras de la historia del cine, Lee nos deja con imágenes de Martin Luther King y Malcolm X, como si representaran las dos manoplas de Radio Raheem: el amor y el odio. 

Aunque se antoja como una dicotomía, los caminos de Malcolm X y el reverendo King no son antónimos, si bien sí eran distintos. Y aunque el primero se asocia con la fuerza de las Panteras Negras y el segundo con la desobediencia civil, ni uno era solo violencia ni otro solo pacifismo. La lucha por los derechos civiles de la ciudadanía afroamericana en Estados Unidos bebió de ambas fuentes, y de tantas más, para lograr sus conquistas. Es un error, entonces, verlos como una disyuntiva; más bien, se complementan. En el sueño de King, en el que los nietos de los que fueron esclavos pudieran compartir con los nietos de los que fueron esclavistas, la visión de Malcolm X claro que tenía cabida. 

Martin Luther King protagoniza el nuevo episodio del pódcast de Diana Uribe sobre procesos de paz. Y en este episodio de Siglo XX, en el que se contextualizó el poder negro, las palabras de King, asesinado en Memphis en el 68, a los 39 años, remiten a lo que estaba en juego durante los años60, a lo que cambió gracias a sus acciones. También nos obligan a pensar en cómo el racismo persiste, en todo lo que falta cambiar.  MLK no es una figura del ayer, sino una referencia para continuar actuando hoy hacia una sociedad sin discriminación. Y Malcolm X también lo es.