El paso de un país rural a un país de ciudades, con cada vez más trabajadores urbanos, así como la identificación del origen de las epidemias en las malas condiciones de higiene y el hacinamiento, hicieron de la salud un asunto de decisión política. Este médico, cuya voz presentamos a continuación, fue uno de los artífices de esta tendencia.
En 1782, la Nueva Granada vivió una terrible epidemia de viruela. Desde aquel entonces y de distintas maneras y enfoques, las elites empezaron a pensar en lo que hoy conocemos como “salud pública”. El ministerio de Higiene surgió apenas en el siglo XX, para pasar luego a llamarse Ministerio de Salud y, finalmente, de Protección Social.
Creación del Ministerio de Salud
Cuando se creó el ministerio, durante el gobierno de Mariano Ospina Pérez, la política pública en salud surgió en medio del conflicto político, la escasez presupuestaria, el sectarismo partidista y la pobreza en campos y ciudades. En ese entonces el diseño de las estrategias sanitarias estaba en cabeza de médicos como Pedro Eliseo Cruz.
Cruz es recordado por haber atendido a Jorge Eliécer Gaitán en la Clínica Central de Bogotá, a donde pudo llevarlo, pues se encontraba con el caudillo en el momento en que recibió los disparos que terminaron quitándole la vida. Fue el segundo Ministro de Higiene y sucedió en la cartera a Jorge Bejarano Martínez.
El enfoque de Pedro Eliseo Cruz sobre la salud pública estuvo centrado en la intervención del Estado en todos los campos de la vida, desde la infancia hasta la vejez, pasando por el trabajo y superando cualquier idea de lo público asociada a la beneficencia y a la caridad. Su filiación liberal le hizo ver la salud como un asunto que recae sobre el Estado y no sobre instituciones como la Iglesia o lo que en ese entonces se conocía como “la beneficencia”.
Por: Ana María Lara Sallenave
