Ficha Técnica
Saddam Hussein fue uno de los dictadores más reconocidos de Oriente Medio durante las dos últimas décadas del siglo XX. Hussein fue un líder político y militar perteneciente al Partido político Baaz Árabe Socialista, que asumió el poder de Irak en 1979. De las acciones más destacadas como gobernante se resalta la nacionalización del petróleo y los fondos iraquíes ubicados en bancos extranjeros.
El poderío militar del gobierno iraquí en cabeza de Saddam Hussein se hizo evidente en las incursiones armadas realizadas en contra de las comunidades chiitas y kurdas en la década de los años 80 y en la invasión a Kuwait que desencadenó la guerra del Golfo Pérsico. Precisamente este último conflicto iniciado en 1990 provocó la ocupación de los EE. UU., los bloqueos económicos y políticos a Irak durante los años 90 y una crisis social al interior del país que aún hoy persiste.
Luego de los ataques del 11 de septiembre de 2001, EE. UU. gobernado por George W. Bush inició la denominada Guerra contra el Terrorismo en la que ocupó territorios de Afganistán e Irak en Oriente medio. En marzo de 2003 invadió Irak bajo el pretexto que Saddam Hussein tenía armas de destrucción masiva en su poder y vínculos con la organización Al Qaeda. Un día como hoy, 13 de diciembre de 2003 en la operación “Amanecer Rojo” el dictador fue capturado por fuerzas militares estadounidenses.
Para el año 2004, los medios internacionales registraron por primera vez las imágenes de Hussein tras las rejas, antes de iniciar el juicio en su contra. Así lo presentó el Noticiero CM& en el siguiente fragmento audiovisual conservado por Señal Memoria.
Hussein fue condenado a pena de muerte en noviembre de 2006 por un tribunal de justicia iraquí. De acuerdo con cifras de algunas organizaciones humanitarias cerca de 300.000 personas fueron asesinadas y desaparecidas bajo el régimen del dictador. El 30 de diciembre del mismo año fue ejecutado, hecho que inició una espiral de violencia que 25 años después sigue imperando en Irak y en la región.
Por: Iván Dario Romero