Señora Isabel fue una novela que buscó retratar la realidad de algunas mujeres colombianas y los prejuicios sociales sobre ellas. Isabel Domínguez de San Martín, su protagonista, emprendió un desarrollo durante 50 episodios que le hicieron pasar de ser una persona limitada en el rol de madre y esposa sumisa a una mujer con más consideración consigo misma y sus propias metas. Además de la defensa a su relación con un hombre mucho menor que ella, la serie también expone tres conflictos principales entre la protagonista y las expectativas sobre ella: familia, pareja y sociedad.
Señora Isabel cuenta la historia de Isabel Domínguez, ama de casa y esposa del abogado Juan David San Martín (Álvaro Ruiz), que comienza una relación con un hombre 20 años menor que ella. Poco después de su estreno, el 7 de diciembre de 1993 en el Canal A, esta telenovela ganó el interés de los televidentes colombianos gracias a su trama atrevida y a los personajes que reflejaban algunos prejuicios y estándares de la época.
Esta telenovela fue escrita por Bernardo Romero Pereiro y Mónica Agudelo, dirigida por Alí Humar y producida por Coestrellas en 1993. El impacto de Señora Isabel fue tal que se han hecho varias adaptaciones internacionales como Mirada de Mujer (Argos Televisión, 1997) y Victoria (RTI y Telemundo, 2007).
Isabel fue conceptualizada como alguien sumisa a las imposiciones de los demás e incapaz de poner límites. A través de ella se narró una historia de aceptación y choque contra las tradiciones con las que fueron formadas muchas mujeres colombianas durante la segunda mitad del siglo XX. Tanto que Judy Henríquez, actriz que la interpretó, sintió un conflicto interno con la pasividad de su personaje.
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La lucha de la protagonista en contra de los prejuicios de su entorno es, precisamente, uno de los puntos principales de la trama de la novela. Se manifiesta principalmente con la defensa que hace de su relación con su amante Miguel Ángel Matiz (Luis Mesa), pero también a medida que va rechazando supuestos sobre su papel como esposa, madre y mujer.
Isabel y la familia
El primer conflicto de Isabel es su rol como madre y ama de casa en la familia San Martín Domínguez. La serie muestra cómo Isabel asume toda la carga doméstica gracias a la poca colaboración de los miembros de su familia. Es ella quien se encarga de supervisar las actividades del hogar, gestionar las compras y reparaciones de la casa, y la mediación en los conflictos entre los miembros de su familia:
Humar, Alí (Director). (1993). Señora Isabel. [Serie] [Cap.02]. Colombia: Producciones Coestrellas. Archivo Señal Memoria, BTCX60-062059.
Isabel, la esposa
El segundo conflicto que se plantea es el papel de las mujeres en una relación. En el entorno de Isabel, ellas deben hacer lo posible por mantener satisfechos a sus maridos: de su buena apariencia, actitud servicial y, a veces, silencio ante faltas de respeto dependía mantener la pareja unida. Esta idea la escuchaba frecuentemente en su cotidianidad:
Humar, Alí (Director). (1993). Señora Isabel. [Serie] [Cap.01]. Colombia: Producciones Coestrellas. Archivo Señal Memoria, BTCX60-062058.
En casa, la responsabilidad ante una infidelidad también recaía en la esposa por una supuesta falta de atención a su pareja. Su hija Juliana, por ejemplo, la acusaba totalmente por la infidelidad de su padre y su madre, Julia Emma Calderón viuda de Domínguez, le recordó durante toda la serie la obligación de las mujeres de cumplir con las expectativas de sus parejas para mantenerlas en casa.
Isabel, “mujer moderna”
El tercer conflicto que enfrenta Isabel es contra las expectativas de las mujeres en la sociedad. La vejez, la apariencia y el peso fueron temas referenciados a lo largo de la trama y varias escenas evidencian cómo el excesivo cuidado de la imagen y distorsionadas ideas sobre la edad eran sostenidas por los círculos cercanos a la protagonista:
Humar, Alí (Director). (1993). Señora Isabel. [Serie] [Cap.02]. Colombia: Producciones Coestrellas. Archivo Señal Memoria, BTCX60-062059.
Una de las mejores amigas de Isabel, María Consuelo Molina, interpretada por María Eugenia Dávila, es el retrato de la mujer moderna que se halagaba en la sociedad de la novela. Consuelo, a pesar estar en estima de las clientes frecuentes del salón de belleza, tenía miedo de engordar y envejecer, al punto de mentir para aparentar ser más joven. Ella era, al tiempo, la amiga más arriesgada de su grupo y un prototipo de las expectativas que recaían sobre las mujeres.
Creciendo con Isabel
A lo largo de 50 episodios Isabel experimenta cambios en su relación de pareja y familia, y se desarrolla como alguien cada vez más dispuesta a darse a sí misma un espacio de autoreconocimiento y escucha. Capítulo a capítulo, ella cambia y deja de prestar atención a los 3 principales prejuicios sobre ella y, por lo tanto, algunos de los supuestos sobre las mujeres en la Colombia de los años 90.
Humar, Alí (Director). (1993). Señora Isabel. [Serie] [Cap.48]. Colombia: Producciones Coestrellas. Archivo Señal Memoria, BTCX60-062105.
Este crecimiento o esta dirección de la trama en la telenovela no es coincidencia, pues fue escrita para hacer un comentario sobre la crianza tradicional de las mujeres en Colombia y los prejuicios sobre ellas en los 90.
¿Señora Isabel marcó una subversión en los roles de género en Colombia? Es difícil responder con un rotundo “sí”. Lo que se sabe con certeza es que la telenovela permitió traer a la conversación reflexiones relacionadas con la cultura en torno a las mujeres en entrevistas y notas en prensa.
El viaje de Isabel se mantiene en la memoria de los colombianos y colombianas que encontraron en él un reflejo de la realidad tal como lo hicieron en su momento celebridades como Gloria Valencia de Castaño, Mercedes Baquero de Francisco y Mónica Agudelo.
Autora: Elsa Garzón
