Los sucesos del 4 de febrero de 1992 constituyen uno de los motivos de disputa entre el régimen de la Revolución Bolivariana y la oposición venezolana. Ese día, un grupo de oficiales movilizó a más de 2.000 hombres con el fin de deponer al presidente Carlos Andrés Pérez (1922-2010). Las consecuencias del intento de golpe, como la captura de su líder, el teniente coronel Hugo Chávez (1954-2013), y el recrudecimiento de la crisis política, siguen vivas tres décadas después.
Diario de un golpe fallido
Los acontecimientos del martes 4 de febrero de 1992 en Venezuela arrancaron la víspera, cuando varios batallones de la regiones central y zuliana se movilizaron en algunas ciudades del país. Su objetivo consistía en detener al presidente Carlos Andrés Pérez a su regreso del Foro Económico Mundial, en Davos, y sustituirlo por un “Gobierno de Emergencia Nacional”, pues un grupo de oficiales lo responsabilizaba de la crisis política y social que atravesaba el país. A medianoche los sublevados que se movilizaron en Caracas asaltaron la Base Aérea La Carlota, así como las dos sedes presidenciales (el Palacio de Miraflores y La Casona), mientras grupos menores intentaban, sin éxito, tomar las oficinas de seguridad y televisión del Estado.
Calderón, P. (directora) (1992). Noticiero de las 7. Colombia: Programar TV. Archivo Señal Memoria, BTM 292029
Los ataques fueron rápidamente repelidos por la cúpula de las fuerzas armadas y su mayoría de unidades, leales al gobierno. Al amanecer del 4 de febrero, los sublevados de Caracas y quienes se dirigieron a la ciudad en su apoyo, ya se habían rendido. Únicamente triunfó el grupo que logró tomar los edificios públicos, las vías y las instalaciones petroleras en Maracaibo. Sin embargo, los integrantes de esa facción se entregaron a mediodía, al saber que el gobierno federal controlaba la situación en el resto del país. Al caer la tarde solo había insurrectos combatiendo en Valencia y Maracay, a cuya rendición exhortó el oficial detenido Hugo Chávez, en una rueda de prensa tan improvisada como recordada: “Por ahora, los objetivos que nos planteamos no fueron logrados en la ciudad capital”.
Calderón, P. (directora) (1992). Noticiero de las 7. Colombia: Programar TV. Archivo Señal Memoria, BTM 292029
Las ideas detrás del golpe
Durante una generación, Venezuela había vivido un periodo de estabilidad socioeconómica y política gracias a la economía petrolera y el Pacto de Punto Fijo (el acuerdo de cogobierno de los partidos mayoritarios), lo cual alejó al país de las amenazas subversivas de izquierda y las dictaduras de derecha. Sin embargo, la corrupción del régimen, la recesión de una economía dependiente por completo del petróleo, y el aumento de la pobreza, afectaron la confianza de la población en el sistema político y en la capacidad de sus gobernantes. El punto de quiebre llegó en 1989 con el Caracazo, cuando las protestas por las impopulares medidas económicas de Pérez derivaron en disturbios, saqueos y una violenta represión de la policía y el ejército. La reputación de un país que al parecer gozaba de una democracia estable y una próspera clase media, condiciones excepcionales en el continente, se empezó a desdibujar.
Calderón, P. (directora) (1992). Noticiero de las 7. Colombia: Programar TV. Archivo Señal Memoria, BTM 292029
Años antes del Caracazo, los militares golpistas ya se habían preparado. En 1982 se fundó el Movimiento Bolivariano Revolucionario 200, una red de mandos medios apoyados por civiles provenientes de grupos de la izquierda radical. Con un discurso nacionalista y antiimperialista inspirado en la figura de Simón Bolívar, el MRB-200 canalizó al interior del ámbito militar la creciente desconfianza que despertaba el sistema de Pacto de Punto Fijo. Y fue precisamente en ese círculo donde escaló posiciones el teniente coronel Hugo Chávez, que en 1991 redactó un proyecto de gobierno y concertó el alzamiento de febrero con los oficiales Joel Acosta, Francisco Arias y Jesús Urdaneta.
Calderón, P. (directora) (1992). Noticiero de las 7. Colombia: Programar TV. Archivo Señal Memoria, BTM 292029
El largo epílogo del 4 de febrero
Chávez y los demás alzados en armas consideraron que habían fracasado, no solo al haber sido derrotados por el gobierno, sino también porque no contaron con una esperada movilización popular de respaldo al golpe. La misma situación se repitió en noviembre de 1992, cuando otros oficiales intentaron asaltar las sedes del gobierno y las estaciones de televisión. Sin embargo, Carlos Andrés Pérez tampoco recibió respaldo por parte del pueblo ni de los partidos políticos, en una crisis que se extendió a mayo de 1993, cuando fue destituido por el Congreso acusado de peculado y malversación. Rafael Caldera (1916-2009), expresidente y crítico del sistema que él mismo había contribuido a establecer, regresó a la presidencia con el propósito de contener la crisis y pacificar al país. Entonces indultó a Hugo Chávez, que en 1999 llegó al poder por la vía de las urnas. Chávez ejerció como presidente de Venezuela hasta 2013, cuando murió.
Calderón, P. (directora) (1992). Noticiero de las 7. Colombia: Programar TV. Archivo Señal Memoria, BTM 292029
Autor: Felipe Arias Escobar