Ficha Técnica
Las medidas para evitar el fraude electoral han sido una constante en la historia política de Colombia. El voto en sombrero, la huella dactilar, la tinta indeleble, el voto electrónico… todo se ha ensayado. Sin embargo, nuestro país ha sido ejemplo de aquello que dice que “hecha la norma, hecha la trampa”.
En Archivo Señal Memoria se conserva una entrevista realizada entre 1949 y 1951 con el Registrador Nacional, Julián Cock, en la cual se alude a la implantación de la huella dactilar en la identificación de los ciudadanos cedulados. Se menciona que la Registraduría Nacional iba a realizar la capacitación de dactiloscopistas que pudieran llevar a cabo la labor en todo el país.
Con esto se daba cumplimiento al Decreto 2046 de 1950, según el cual “se dictan disposiciones para garantizar la pureza del sufragio”.
¿Qué era lo que pasaba en Colombia que condujo a dictar esas disposiciones?
La situación
En 1949, con ocasión de las elecciones presidenciales en las que aspiraba a la Presidencia de la República el conservador Laureano Gómez, el candidato hizo famosa aquella afirmación que decía que los liberales tenían en su poder un millón ochocientas mil cédulas falsas. Estas “serían utilizadas para modificar la elección del nuevo mandatario”, la cual, asumía el candidato Gómez, iba a ser ganada por él.
Así mismo, 1949 fue el último año de Mariano Ospina Pérez. La violencia partidista asolaba los campos. En noviembre fue cerrado el Congreso. Meses antes, un tiroteo en su recinto dejó víctimas fatales.
Tras la muerte de Vicente Echandía, su hermano Darío, el candidato liberal a la Presidencia de la República, renunció a su aspiración. En las elecciones de noviembre Laureano Gómez fue elegido sin haber enfrentado a ningún rival.
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Las elecciones de 1951
Tras el cierre del Congreso, las siguientes elecciones legislativas que lo reabrirían debían llevarse a cabo en junio de 1951. La fecha fue fijada en el Decreto 2046 de 1950, firmado por el saliente Mariano Ospina Pérez.
De cara a estos comicios se tomaron las medidas contempladas en tal decreto, con el fin de garantizar los resultados. Recolectar las huellas digitales de los ciudadanos y la revisión de cédulas, fueron parte de las precauciones tomadas para evitar la duplicación o suplantación de votantes.
Las elecciones se llevaron a cabo bien avanzado el año, en septiembre de 1951. Debido a la tensa situación de orden público contó únicamente con la participación de los conservadores, aunque también hubo una insignificante participación del Partido Comunista. En algunos departamentos se suspendieron por completo los comicios y en otros parcialmente.
Autor: Javier Hernández