Ficha Técnica
El especial Grandes Literatos tiene por objetivo resaltar a algunos de los escritores más destacados, rupturistas, innovadores, y polémicos de los últimos dos siglos; desde el existencialismo de Fiódor Dostoyevski hasta las polémicas en torno a la obra de Salman Rushdie.
En su octava entrega presentamos a uno de los escritores más conocidos e importantes de los últimos dos siglos, el novelista ruso León Tolstói. Sus obras, junto con las de Fiódor Dostoyevski, son consideradas las más importantes del llamado realismo ruso, ya que a través de sus múltiples novelas no solo plasmó los acontecimientos políticos y sociales de su pueblo, sino también sus experiencias personales.
Nacido en el seno de una importante familia aristocrática, durante su juventud se entregó, al igual que Dostoyevski, al juego, lo cual ocasionó que contrajera varias deudas; convencido por su hermano, y como una forma de escapar de sus excesos, decidió entrar al ejercito durante la Guerra de Crimea. Aunque se desilusionó rápidamente de esta forma de vida, fue durante este periodo que Tolstói empezó a escribir teniendo como base sus propias experiencias; estos primeros experimentos fueron la trilogía Infancia, Adolescencia, y Juventud, así como Relatos de Sebastopol, años después también vería la luz una de sus obras más destacadas, la novela corta Los Cosacos, la cual lo posicionó como escritor con cierto renombre.
Entre 1965 a 1969 Tolstói publicó a través de fascículos de la revista literaria Russki Viéstnik su obra Guerra y Paz, la cual, siendo algo poco común en su momento, fue escrita en ruso. Adicionalmente, el autor empezó a demostrar en esta el uso de los nuevos recursos narrativos del momento, como lo son la utilización del detalle en las descripciones de los personajes y los entornos. Casi diez años después se publicó Ana Karenina, una novela de suma importancia ya que no solo muestra las transformaciones de la sociedad rusa a raíz de las reformas de Alejandro II, sino que también refleja el pensamiento de Tolstói sobre la clase campesina, algo que ya había trabajado casi veinte años antes en La mañana de un terrateniente.
El Archivo Señal Memoria ofrece a nuestro público los siguientes fragmentos del programa Descubriendo, producido por Diego Carrizosa Posada en 1998, en el que el humanista Alfonso Ricaurte Uribe analiza la importancia de este escritor para la literatura rusa.